Desde siempre he sabido que en nuestro pequeño, pero muy completo país ha existido esta barrera entre la población. Que si soy de la capital, de Petén, de Huehue, de Xela, de la costa, de tierra fria, de Oriente, de piel blanca, de piel negra, una canchota oxigenada o un moreno chaparrito, etc, etc, etc. La discriminación y el rechazo perenne que todavía sucede en varios lugares de la capital no da paso a lograr una sociedad más unida y fortificada. Inclusive nosotros mismos no contribuimos a erradicar este mal que sin querer queriendo esta dañando el desarrollo, y luego vemos todos los males que nos rodean; ya sean los delincuentes o maras que fueron rechazados y juzgados en la escuela o colegio, así como los niñas con mucha ventaja económica que se aprovechan de los que no la tienen, e inclusive entre nosotros cuando no dejamos que alguno de nuestros amigos o amigas tengan éxito en su vida. Últimamente también se ha estado manejando el término de discriminación ladina. Que consist...
Puros platillos pasados.