Propongo que de hoy en adelante el Congreso de la República sea integrado por infantes de no más de 10 años... a como van las cosas, sale más caro mantener a una bola de idiotas, payasos, improductivos y huevones, que no pueden siquiera tomar decisiones sin hacer berrinches y hasta ofrecerse cuentazos. Para circos, mejor les ponemos una carpa en el Campo Marte y ahí que hagan sus shows... nos sale más barato.
Para fundamentar un poco mi propuesta, acá les van las razones por las cuales pienso que con niños en el Congreso la cosa funcionaría mejor y de manera más simple sobre todo por lo que yo recuerdo de mi infancia:
- Las decisiones importantes las tomaba uno mediante un práctico "Tin marín de do pinwé, cúcara, mácara, títere fue, yo no fui, fue teté, pégale, pégale a quien fue...".
- Y cuando las cosas se ponían complicadas, podía detenerlas con un simple "¡Zafo!".
- La peor consecuencia de mis travesuras era hacer de esas planas que empezaban con el "No debo..." unas 100 veces.
- Para salvar a todos tus cuates bastaba con un grito de "Un, Dos, Tres... ¡chiviricuarta por mí y por todos!"
- Siempre descubrías tus más ocultas habilidades y talentos por medio de un "¡A que no podés hacer esto...!"
- "Jugar con fuego" no era más que un sinónimo de quemar cuetes, volcancitos y estrellitas en diciembre.
- Te preocupaba llegar tarde pero nada más porque antes de salir corriendo gritabas "¡El que llegue de último es un tonto!"
- "Policías y Ladrones" era sólo un juego para el recreo... y por supuesto era mucho más divertido ser ladrón que policía...
- Las "vejigas con agua" eran la más moderna, poderosa y eficiente arma que jamás se había inventado...
- Las únicas leyes que valían era la ley del tubo, la ley del hielo, etc.
- Para tener pisto sólo hacía falta poner uno de los dientes que se te habían caído debajo de la almohada.
- Era fácil descubrir quién se había tirado un pedo: era el que tuviera las OREJAS CALIENTES.
- El grito de "¡¡¡GUERRITAS!!!" sólo significaba arrojarse borradores y bolas de papel durante las horas libres de clase...
- Tu pirámide alimenticia estaba compuesta por Tortrix, Jalapeños, Palitos, Paletas, Nachos, Elotitos, Chicles, Bombones,etc. En resumen, frituras y azúcar.
- Tu presupuesto nunca excedía los 5 quetzales y vos eras feliz y hasta te llenabas... jajajaja...
- Un gran paso en tu vida era quitarle las rueditas a la bici...
- El negocio del siglo era conseguir cambiar 10 estampitas o PepsiCards repetidas por la que hacía tanto tiempo andabas buscando.
- Era un gran tesoro si encontrabas trozos de yeso en los botes de basura para poder dibujar en el suelo y jugar avioncito...
- Si alguno de tus cuates hacía algo malo, se lo hacías ver con un "Vaya, vaya la papaya, que la vieja se desmaya..."
- Los mayores insultos eran del tipo "cabeza de borrador", "ojos de piedra", "cachetes de bolsa", "nariz de florero", etc.
- El único problema que tenías con una mujer era que intentara darte un beso... en el cachete... "Wácala, que asco las niñas"...
- De lunes a viernes la única cita era a las 4 en punto para sentarnos frente a la tele con los ojos bien abiertos a ver Dragon Ball, los Caballeros del Zodiaco, He-man, Voltron o Candy.
- Y cuando ya no querías algo y querías donarlo nada más gritabas "¡Chin, chilete...!"
Todas estas simples cosas nos hacían felices, no necesitábamos algo más... era suficiente para ser dueño y señor del mundo, porque el mundo era un cinco, una chimbombola...
Simplemente requerías una pelota, una cuerda y dos amigos para pasarla bien durante toooooodo el día, aunque estuviera lloviendo... era así de simple... así de fácil...
Ahora es igual, sólo que diferente. Los niños decrépitos, los ishtos calvos, los güiros panzones... esos nos gobiernan... :(
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